La resistencia a la rodadura de un neumático es una de las cinco fuerzas, junto con la gravedad, aerodinámica, inercia y fricción mecánica, que un vehículo necesita para ponerse en marcha. En pocas palabras, sería la cantidad de energía que utiliza un neumático en una distancia determinada. A continuación, en Confortauto te exponemos todas las claves al respecto para que conozcas su importancia.
¿Qué es la resistencia a la rodadura?
La fuerza que se opone al movimiento natural del vehículo, especialmente cuando la rueda, o la superficie, se deforman. Esta resistencia aporta hasta un 30% de la energía necesaria para mover las ruedas. Se origina en el punto en el que contacta la rueda con el asfalto o cualquier otra superficie. Si se circula a una velocidad baja, es la que permite que el vehículo avance. De hecho, cuanto mayor sea, más probabilidades habrá de reducir, tanto el consumo de combustible, como las emisiones contaminantes.
Su origen está en:
- El rozamiento interno del rodamiento del neumático.
- El contacto entre el neumático y la calzada.
Ambas circunstancias se unen para crear la energía necesaria que permite que una rueda se mueva. Sin embargo, la segunda opción aporta un 98% de potencia y la primera solo un 2%, aproximadamente.
Debes saber que una rueda está formada por una estructura viscoelástica que incluye distintas capas de cadenas formadas por polímeros. Estas son las que se rozan entre sí, se comprimen y se adaptan al movimiento.
¿Cómo se calcula el coeficiente de resistencia a la rodadura?
Aplicando la siguiente fórmula: FR= CR x FN. Es importante tener en cuenta los siguientes factores para que el cálculo sea exacto:
- FR: son las siglas que aluden a la resistencia a la rodadura.
- CR: es el coeficiente de la antedicha resistencia. Es igual a dividir la distancia recorrida medida en metros por el radio de la rueda (d/R).
- La distancia recorrida indicará cuál es espacio existente entre la FN (fuerza normal) y el centro del neumático. También se mide el nivel de deformación durante su funcionamiento.
El cálculo del coeficiente puedes evitarlo siempre que tengas acceso a una tabla con los valores de fricción de distintas parejas de materiales. En este caso, basta con introducir el valor correspondiente en la ya comentada fórmula.
¿Son recomendables los neumáticos con baja resistencia a la rodadura?
Es posible que pienses que, a mayor resistencia, más beneficios, pero no es así. De hecho, contar con neumáticos con baja resistencia a la rodadura te ayudará a:
- Consumir menos combustible: se estima que ahorrarás en torno a un 3%. Con un recorrido medio de 50.000 kilómetros al año estaríamos hablando de cientos de euros ahorrados.
- Mejorar la adaptabilidad del neumático al uso habitual del vehículo: este tipo de producto se adapta mejor al peso y a cualquier tipo de calzada, lo que aumenta su eficacia.
¿Cómo puedes conocer cuál es la resistencia a la rodadura de un neumático?
Aunque ahora sí sabes en qué consiste la ecuación para descubrirlo, la industria te ofrece otra manera de conocer el dato: una etiqueta identificativa. Se incluye en los productos nuevos, para clasificarlos entre las letras A y G, así como una escala de colores que va del verde al rojo. Dependiendo de tu elección, así será el consumo de combustible y el desgaste correspondiente.
Es importante que tengas en cuenta la información anterior y apostar por neumáticos para el invierno y el verano. En confortauto.com puedes comprar ruedas online para todo tipo de estaciones y conducir con seguridad en cada momento del año según el clima. Si hablamos de las cubiertas de verano, siempre que tengan la presión recomendada, te facilitarán el ahorro de hasta medio litro de combustible por cada 100 kilómetros.
Aspectos que influyen en la resistencia
Debes recordar que en la comentada resistencia influyen aspectos como:
- Presión: si es inferior a la recomendada, aumentará la resistencia. Cada vehículo exige una distinta. Recuerda no excederte ni por exceso, ni por defecto. Comprueba, antes de cambiar una rueda, que la resistencia elevada no proviene de una presión poco adecuada.
- Calidad del neumático: la dureza debe estar conectada con la superficie sobre la que se va a circular principalmente. Cada tipo de suelo exige un material específico.
- Diseño interno: los artículos que prometen el ahorro de combustible son más resistentes ante la deformación.
- Medidas: cuanto más ancha sea la goma, mayor será su resistencia. Sin embargo, las opciones más estrechas tampoco garantizan la adaptabilidad total a algunas superficies. Lo más adecuado es elegir la medida que mejor encaje con el tipo de vehículo que se vaya a emplear.
- Tiempo de uso: el cambio de neumáticos siguiendo las directrices del fabricante es indispensable para el ahorro de combustible y el aumento de la seguridad a la hora de conducir.
- Tipo de carretera: su revestimiento es esencial, ya que el asfalto exige mayor resistencia que la arena, por citar dos ejemplos. Recuerda que hay una rueda para cada situación.
Resumen
Si tienes algún tipo de duda a la hora de elegir la resistencia a la rodadura de tus próximos neumáticos, confía en Confortauto. Te asesoraremos y te ofreceremos un servicio profesional y totalmente personalizado.