En muchas ocasiones, el hecho de aparcar puede parecernos una auténtica odisea. Sin embargo, a día de hoy ya no tienes excusa para evitar estacionar tu coche en un aparcamiento estrecho. Vas a conocer qué son y cómo instalar sensores de aparcamiento. Desde Confortauto nos proponemos ayudarte para que domines esta maniobra tan complicada y que tantos roces provoca. El sensor de aparcamiento es una herramienta ideal para ti, ya que no tendrás que volver a preocuparte por aparcar ni por esos molestos rayones.
¿Qué son los sensores de aparcamiento?
Este invento ha revolucionado la industria automovilística, hace tan solo un lustro parecían funciones sacadas directamente de las películas de ciencia-ficción. Actualmente, la mayoría de marcas de automóviles incorporan estos sensores entre sus modelos más destacados. Se trata de un aliado confiable a la hora de aparcar, puesto que nos garantiza total seguridad en el proceso de aparcamiento.
La característica más importante de este tipo de sensores es la de facilitar la maniobra del vehículo en lugares ajustados. Además, los investigadores más punteros también están desarrollando otros dispositivos para evitar posibles atropellos y colisiones. A continuación, te vamos a enseñar cómo funcionan y cómo puedes obtener uno si tu coche no lo trae incorporado.
Todo sobre los sensores dedicados al aparcamiento
Un sensor de este tipo puede ser colocado en cualquier vehículo. Sí, oyes bien, incluso en un 600. Por esta razón, no te preocupes, si tu coche no trae estos dispositivos incorporados, ahora mismo te enseñamos cuál es la mejor forma de instalarlos. La detección de movimiento suele colocarse, en el mundo del motor, en la parte trasera de los vehículos, puesto que es la zona más sensible a roces y la que exponemos a la hora de aparcar.
¿Qué se necesita para añadir estos sensores?
No mucha parafernalia. Tan solo tendrás que proveerte de un kit, que suele traer generalmente 4 sensores por cada defensa. Es decir, cubre las cuatro esquinas del chasis, tanto las delanteras como las traseras.
El precio del kit varía entre los distintos modelos disponibles en el mercado. Normalmente oscila entre los 30 euros y hasta los 150 euros, teniendo en cuenta la calidad de los materiales y el prestigio de la marca. Te recomendamos que compres con sensatez, ya que no siempre es necesario tirar la casa por la ventana y comprar los sensores más caros. Por el contrario, tampoco seas de la hermandad del puño cerrado. Un kit cutre jamás va a funcionar como esperas y dejará a tu vehículo indefenso frente a golpes o rayones.
Precio de la instalación de los sensores de aparcamiento
El precio de esta operación, de nuevo, varía entre la cantidad de sensores que vayamos a colocar y su precio. No obstante, el precio medio suele rondar los 150 euros. Teniendo en cuenta los costes relacionados con la reparación de la chapa o la pintura, no es para nada una modificación cara. Otra ventaja es que no son modificaciones que requieran de una homologación oficial, por lo que la revisión de la ITV no será ningún inconveniente. El resultado es 100% recomendable, ¡no tengas miedo a aparcar!
Guía para montar un sensor
1. Contar con todas las piezas
Asegúrate de tener todas las piezas necesarias para llevar a cabo la instalación. Luego, has de desmontar los pilotos traseros. En este paso es necesario retirar el paragolpes para dejar hueco al transcurso del cableado.
2. Tomar la corriente y masa del piloto
Con el polímero podrás localizar la luz trasera y la señal. Una vez hayamos encontrado todos los cables, los pelamos para poder empalmar la centralita. Con los cables pelados, señalamos con algún rotulador el espacio donde emplazaremos los sensores. Ahora es el momento de ayudarnos de un taladro. Las señales que hemos indicado previamente tendrán que ser taladrados con una broca especial, normalmente incluida en el kit del sensor. Hazlo despacio y sin prisa, y procura repasar la superficie rugosa con una lima.
3. Introducir el cableado
Después de haber taladrado y contar con agujeros, el siguiente paso es introducir el cableado del sensor desde el paragolpes al interior del maletero. En el interior del maletero desmontamos un panel lateral para instalar tanto la centralita como el avisador acústico que previene las colisiones.
4. Conectarlo a una pantalla
Con todo preparado en la parte de atrás, es el momento de desplazar el cableado hacia delante y conectarlo a una pantalla. El nexo de unión entre ambos sectores será la caja de fusibles. Por último, colocamos la pantalla en una posición central del salpicadero y nos cercioramos de que todo funcione. ¡Ya tienes tu sensor instalado!
Conclusión
Aunque ya has aprendido qué es un sensor de movimiento y cómo instalar sensores de aparcamiento, en Confortauto podemos ayudarte. Tienes a tu disposición más de 750 talleres mecánicos a los que podrás acudir para la colocación de este tipo de dispositivos. Así, tu experiencia a la hora de aparcar no volverá a suponer ningún problema.